¿Manejas correctamente tus redes sociales como escritora de novela romántica?

redes sociales para escritoras de novela romántica
¿A que a veces tienes la sensación de que por mucho que te esfuerces nunca terminas de cogerle el tranquillo a las redes sociales? No te agobies, es un sentimiento compartido, te lo aseguro. Tener presencia en Facebook y Twitter es casi tan imprescindible como corregir tu novela, pero no siempre le damos buen uso. Las redes sociales son para interactuar con tu público, es decir, que tus lectores te conozcan y generar confianza con ellos, por eso estar todo el día en los tropecientos grupos de Facebook poniendo el mismo mensaje de «compra mi libro, no te dejará indiferente» es un error. Así no generas confianza, solo hastío, que se aburran de ti y terminen odiándote.
Es como cuando pones algo en Twitter y lo compartes en Facebook sin tener en cuenta que son redes distintas que requieren comportamientos diferentes. No te estoy diciendo que no hables de tu novela, claro que tienes que hacerlo, pero con cabeza y moderación.

Si escribes romántica, tus lectores están en Facebook

La comunidad de romántica se mueve principalmente por Facebook, red social que a las escritoras no nos gusta nada o bastante poco en general. Como se supone que se debe compartir contenido en una proporción de 80-20 (ajeno-propio), durante unos meses hice un experimento en mi fanpage de Facebook, compartía enlaces y noticias que creía que podían interesar a mi audiencia dos veces al día y contenido mío o de mis libros una o dos veces a la semana. El resultado fue que mi página murió. Tenía cero interacciones, cero crecimiento, cero comentarios y algún que otro me gusta de personas incondicionales que tienen todo mi cariño. En definitiva, un desastre.
Cuando le echas tanto tiempo a averiguar qué aplicaciones son mejores para programar contenido, te gastas el dinero en ellas, estudias estadísticas, te tiras horas leyendo feeds, etc., y pasan estas cosas, te entran ganas de tirarte de los pelos y arrancártelos todos. Viendo que la cosa iba fatal, decidí investigar a mis compañeras de letras -que no espiarlas o copiarlas, la ética siempre debe estar por encima de todo-. Hice una lista de escritoras con más o menos reconocimiento y buena presencia en Facebook y miré sus páginas para ver qué contenidos tenían más éxito. Muchas ni se molestaban en actualizar la página y se volcaban en mantener un perfil más o menos activo (si quieres saber por qué es mejor tener página que perfil como escritor, léete este artículo de MOLPE), pero la gran mayoría solo ponían cosas de ellas y de sus novelas, y nada o poquísimo de contenido ajeno.
Pensándolo fríamente, si los lectores siguen tu página  -los sorteos no cuentan- es porque quieren informarse de lo que estás haciendo, saber cuándo sale tu próxima novela o lo que estás escribiendo en estos momentos. Quieren saber de tu yo escritor, para leer sobre maternidad, la actualidad de la mujer o las relaciones echan mano de otros medios. Así que cambié el contenido y empecé a crear expectación de mis novelas, antiguas y nuevas, a poner trocitos, montajes de fotos, etc., y no es que haya tenido un aumento de la leche -los cambio de algoritmo han hecho mucho daño-, pero por lo menos la página ha revivido, tengo más interacciones y comentarios y tiene un crecimiento, lento, sí, pero mucho mejor que cero. 
Mi consejo es que pierdas un poco de tiempo en estudiar cómo se mueve tu audiencia en Facebook, analiza el resultado de tus distintos post, lo que tiene más alcance, etc., así dejarás de dar palos de ciego y tendrás la seguridad de que las horas invertidas te darán un beneficio.
En Twitter, sin embargo, ocurre todo lo contrario. Es una fuente increíble para hacer contactos y establecer relaciones de confianza con otros escritores o profesionales de la edición -correctores, maquetadores, ilustradores-. En el caso de la romántica, no esperes encontrar a grandes comunidades de lectores del género allí, para eso está Facebook e Instagram, que viene pegando fuerte. Twitter es dónde puedes crecer como profesional. Aquí, la regla del 80-20 es importante porque la cantidad de contenido que puedes publicar se triplica con respecto a otras redes. Yo suelo publicar ocho tuits al día, de los cuales uno o dos son míos, el resto son artículos de cómo escribir mejor, curiosidades de la literatura, maternidad, relaciones, márquetin y un largo etcétera que hace de mi timeline un sitio interesante para visitar.
Sé que esta red es difícil de manejar si no estás habituada, pero una vez que te metes en ella, es muy fácil y dinámica y merece la pena ponerle un poco de esfuerzo.

Para saber las mejores horas para publicar en Twitter, yo uso Tweriod. Es una herramienta gratuita que analiza a tus seguidores. Para usarla solo tienes que registrarte con tu cuenta de Twitter, una vez que te sale la pantalla general le das a My Analysis y te salen las mejores horas para tuitear y el número de usuarios conectados por hora discriminando entre días laborales y fines de semana. Teniendo en cuenta que los tuits tienen una vida muy efímera, saber cuándo es el mejor momento para poner algo es bastante importante para que no se pierda en el mar de contenido.
Si las redes sociales son para socializar, no te limites a poner el enlace de Amazon de tus novelas e irte. Pregunta, comenta, comparte inquietudes, nunca copies post de otras compañeras ni las imites, inspírate en ellas.
¿Cuál es tu red social favorita? ¿Cómo la manejas? Dímelo en los comentarios.

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4 comentarios en “¿Manejas correctamente tus redes sociales como escritora de novela romántica?”

  1. Si te digo la verdad, Paola, no tengo una red social preferida. Sí que veo más movimiento en Instagram respecto a lo que publico en él. Facebook y Twitter se me hace más difícil llegar a la gente. Tal vez sea porque no genere contenido de interés, como comentas, y últimamente se me hace muy pesado estar pendiente de las redes. Sé que son necesarias para hacerte ver en el mundo literario, pero, oye, parece que soy invisible, jajajajaja

  2. Trabajar la visibilidad es muy desagradecido porque los resultados solo se ven a largo plazo. No te rindas, hazte un calendario, mira los programadores de redes (te quitan mucho trabajo, de verdad). Si eres invisible en internet, los lectores no te descubren.
    Gracias por pasarte, Elena! Un besico.

  3. Me pasa igual, qué mal debo hacerlo! En FB me he enquistado en una zona de confort (mi perfil) y más que nada, charlo con los de siempre (aunque algunas son lectoras). Y eso que, últimamente, como que charlo más en tuiter, que buf, me cuesta, porque es tan poco agradable, pasa todo tan rápido…
    No sé, a ver si algún día empiezo a hacer comunidad, porque se me va a pasar el arroz! ;DDD

  4. Los cambios de algoritmo en las fanpages de Facebook hacen muy difícil tener alcance, pero es más recomendable que tener solo perfil. Es verdad que se tiene tendencia a usar más el perfil porque además es con el que interactuamos en los grupos, pero las páginas den una visión más profesional. Así lo creo yo, vamos.
    Muchas gracias por pasarte, Yolanda!!

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